PASAJES DE LA VIDA

Las cinco películas que componen este itinerario nos brindan un recorrido fílmico por etapas cruciales de la vida.

Las infancias normalmente son retratadas o recordadas como momentos felices, quizás porque tenemos la capacidad de olvidar o porque tratamos de borrar lo que nos hizo sentir mal. Sin embargo, esos sentimientos escondidos acaban aflorando y determinando lo que seremos después.

La adolescencia, normalmente tratada como etapa de descubrimiento, como puente entre la infancia y la edad adulta, es un punto de inflexión confuso, y a menudo doloroso, pero también en cierto modo liberador.

Más doloroso aún es darte cuenta de que ya no eres joven, de que la sociedad te dice que las dinámicas en las que estás metido ya no son propias de tu edad y que necesitas replantearte tu modo de vida.

Para muchos, la maternidad-paternidad podría verse como una forma de sentar la cabeza, pero pocas veces se habla de lo difícil que es. Por eso es necesario que el cine nos hable no sólo de las luces, sino también de las sombras, de las dificultades de la maternidad, del cambio radical que supone en tu vida, tanto personal como profesional, y fundamentalmente en tu relación de pareja.

Este itinerario presenta el trabajo de cinco cineastas que han sabido plasmar a la perfección esos momentos vitales, mirando en todo momento a sus personajes con mucho amor, respeto y comprensión.

Gracias a estas películas nos damos cuenta de que nada nos es ajeno, que al final son más las cosas que nos unen que las que nos separan.

Mercedes Martínez Abarca